AÑO 2015,
MARZO- ABRIL VOL. 8 No. 60, 06/ABR/15
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Cómo citar el artículo:
Rosas A. L.: "Sexo y Discapacidad
Física". (marzo-abril, 2015). Centro de Capacitación Profesional,
Industrial y Profesional S. C. [en línea] 06 de abril, 2015. Vol. 8,
No. 60. Disponible en Internet: http://cecapip.blogspot.mx. ISSN 2007-9486.
Sexo y Discapacidad
Física
Y
es una realidad que cuando estamos enfermos no se nos antoja mucho el sexo y
menos cuando la enfermedad cualquiera que padezcamos está en su momento más difícil.
Y en el mejor de los escenarios si la enfermedad pasa pronto reanudaremos el
sexo con la mayor normalidad posible, pero, ¿qué sucede cuando la condición que
tenemos, o el hecho de que padezcamos una enfermedad crónica e incurable sea una condición
presente en nuestras vidas?. ¿qué pasa con nuestra sexualidad?.
He
escuchado a personas que penosamente consideran que eso es algo que se debe de
olvidar, !hay cosas más importantes, dicen!. Y si bien es cierto que en algunas
circunstancia no se nos antoja o no se puede, tenemos que recordar que la
sexualidad en el sentido amplio de la palabra es energía vital, es energía de
vida. Y la pregunta entonces es:¿porque alguien enfermo debe de cancelar su vida sexual, cuando ésta puede
proporcionarle momentos muy placenteros y llenarlo de energía vital?.
Claro
está que hay cosas importantes, que van a depender de la enfermedad o condición
que se padezca y del momento en que ésta presente. Si hay malestar físico,
dolor, molestias, lo primordial es atender eso, pero ya una vez estabilizado,
en control de síntomas, o mejor aún en control de la enfermedad, debemos como
obligación recuperar nuestra vida, una vida sexual, lo más saludable y
placentera posible.
Creo
que en cada una de las posibles condiciones de enfermedades que encontramos,
tendríamos que hacer precisiones. Por lo que en esta ocasión solo hablaremos de la discapacidad física y el ejercicio de la
vida sexual.
Es
muy importante entender que una persona con discapacidad tiene deseo sexual
igual que cualquier otra persona "normal" , ni las discapacidades
físicas, ni las intelectuales afectan el deseo sexual. Recordemos que el deseo
sexual esta en nuestro cerebro en primera instancia y ya después éste manda las
"órdenes al cuerpo" de reaccionar como debemos de reaccionar ante los
estímulos eróticos.
Decir
que es posible y deseable que las personas con discapacidades físicas tengan
una vida sexual plena no implica que sea fácil lograrlo, siendo encontrar
pareja lo más difícil. Si es que nunca la han tenido o en el momento de la
discapacidad no tenían. Todos
necesitamos en algún momento de nuestra vida tener una/un compañero/a, una
pareja con la cual compartir emociones, sentimientos, cuerpo, sexo, pero saber
que la pareja que vamos a elegir tendrá algún tipo de discapacidad no todos nos
atreveríamos a elegir. ¿Motivos? muy diversos, siendo el más importante todo lo
que implica estar cerca de una persona con una discapacidad física que por muy
independiente que sea, siempre va a tener grados de dependencia mayor a cualquier
otra persona que llamaríamos "completa o normal".
Sin embargo hay que
entender que las más de las veces nos dejamos llevar por las apariencias y
creemos que si tiene sus dos piernas funcionales y puede caminar y por lo tanto
lograr todo lo que se proponga, no es el cuerpo funcional lo que hace que las
cosas sucedan, sino es el alma, el espíritu el que desafía a todo, siempre y
cuando se quiera el que permite que permite que todo se logre aún y con cuerpos conlimitaciones anatómicamente hablando.
Son
funcionalmente capacidades diferentes que implica retos diferentes y logros
diferentes, no es un cuerpo completo el que lo logra, es una mente dispuesta a
luchar por lograr lo que se desee. He conocido personas que aún y con la presencia
de una discapacidad física es mil más funcional y exitoso que alguien que en
apariencia tiene todo su cuerpo para lograr lo mismo o más. Nos asusta que
pueda depender, que pueda ser una carga, pero conociendo a otras personas que
lo son y con todo su cuerpo funcional, aún y con eso son dependientes físicos y
emocionales de los demás, eso, eso si me asusta mas.
La
mentalidad y la persistencia son esenciales para que una persona discapacitada
logre encontrar una persona para que sea su pareja. No es imposible, pero lo real es que también hay que
considerar que vivimos en una sociedad que aún no tiene la suficiente apertura
para incluir a las personas con discapacidad física y menos aún la mental. Y
que muchos pensarían, ahh no sé porque no logra tener pareja siendo tan linda/
tan guapo. Y nosotros mismos lo que podemos decirle a un hijo, por ejemplo, que
no nos gustaría que anduviera de novia/o con alguien con alguna discapacidad.
Otro
de los problemas más grandes que tiene una persona con discapacidad es su enojo
o su descontento hacia su condición, y ello no contribuye a que sea fácil
conseguir una pareja. Si estamos en esa condición, enojados, es muy fácil que
nos autocompadezcamos y creamos que nadie nunca querría estar con un discapacitado
y esa actitud aleja a las personas que se nos acerquen La actitud positiva es una gran imán para
encontrar pareja.
Una
realidad a considerar también es el hecho mismo de la relación sexual. Y
mientras el deseo este intacto, a lo mejor hay que cuidar el cómo se exprese el
acto sexual. Esto va a implicar probablemente un cambio radical en nuestra
forma de pesar al respecto de la sexualidad.
Hemos estado muy acostumbrados a
pensar en la relación sexual como solo genitalidad y aunque si efectivamente es
muy placentera, lo mas nutriente, lo más sabroso del sexo esta en todo el juego
erótico previo o post sexo. Los besos, las caricias, hablar durante, escuchar,
la práctica de variantes sexuales como el sexo oral, la masturbación mutua y
principalmente el compartir erótico en pareja. Nunca se nos olvide que el más
importante órgano sexual es el cerebro y éste es nuestra máquina perfecta que
todo puede lograr. Y si por alguna razón no se puede, lo logra compensar
haciendo que otras partes de nuestro cerebro o cuerpo funcionen para la
satisfacción sexual.
Recuerdo
a un varón joven que en un accidente pierde su sensibilidad en la parte
inferior de su cuerpo. El tenía una lesión medular y después de su obvia
depresión por su gran pérdida, y a casi a punto de perder su relación de pareja
por el abandono y enojo de su duelo, tomo la oportunidad de volver a
intentarlo, a retomar su vida ahora en sus nuevas capacidades. Sexualmente para él al menos de principio le era muy frustrante que al no tener erección
consideraba que no iba a poder satisfacer a su pareja. Tuvo que hacer muchos
cambios en su forma de pensar, aprender a hacer uso de otras variantes y
descubrir que la mayor satisfacción para su pareja estaba en el hecho de verlo
vivo, con ganas de luchar y dispuesto a hacerla feliz.
Ella tenía satisfacción
sexual, por medio de sexo oral y masturbación, y era feliz al verlo luchando.
Pero él no se sentía satisfecho. Aprendió a usar una prótesis que se ponía en
el pene para que ella se estimulara con ella sentada arriba de él, en una
simulación de coito. Lo cual fue muy placentero para ambos. Y la pregunta que seguramente nos hacemos...
¿y él? ¿qué pasó con él y su placer sexual?, entendiendo que los besos y las
caricias era muy placenteras, que la estimulación usando sus sentidos (vista, oído,
olfato, gusto) era muy grata, el no tenía sensibilidad en sus genitales, ni
erección. Pero el ya había tenido experiencias sexuales y en su memoria estaba
registrado todo ese placer. Tuvo que aprender a trasladar sus placeres a otras
zonas de su cuerpo. En donde descubre que en la estimulación oral en los dedos
de sus manos empieza a tener sensaciones orgásmicas muy semejantes a las que
experimentaba con su pene. ¿Cómo es posible?..... la apertura a la
experimentación del placer, lo erótico de los estímulos visuales, auditivos,
gustativos y por el olfato y por supuesto las sensaciones de su piel; pero principalmente
el haber aprendido a quitarle a sus genitales toda la carga de su placer sexual
hizo posible esta situación.
En
relación a las discapacidades físicas primero se tiene que hacer una valoración
médica para conocer las afectaciones en la vida y principalmente en la vida
sexual. Buscar ayuda médica, una prótesis, o asesoría en rehabilitación física
para aprender a manipular el cuerpo y cuidar
de posibles lesiones o daños y terapia sexual de pareja son grandes
ayudantes para sobrevivir a la discapacidad y construir nuevas maneras de
expresar el placer sexual en pareja.
La
idea en general es que ni la enfermedad, ni la discapacidad pueden limitarnos
en la vida, y lo sexual es una de las áreas en la vida humana que tiene una
inmensa plasticidad, tan estrecha como
tan ancha, tan limitada como tan amplia, así puede ser nuestra expresión
sexual, todo depende de nosotros. Si el cerebro es el órgano sexual más
importante, las posibilidades son infinitas entonces, aunado a eso están
nuestros sentidos y nuestra infinita capacidad para el placer. Las limitaciones
no las pone en realidad el cuerpo, las limitaciones están en nuestra cabeza en
realidad. De nada nos sirve tener cuerpos funcionales si no expresamos todo
nuestro potencial. Las limitaciones físicas, no impiden la expresión de nuestra
sexualidad.
Siempre
he pensado que el termino discapacidad hace alusión a limitaciones, y en el ser
humano no existe ninguna siempre y cuando nuestra mente y nuestro corazón así
lo quiera.
Todos
tenemos cuerpos diferentes con capacidades diferentes.... pero con todo el
potencial para ser, lograr, tener, experimentar y disfrutar todo lo que
queramos. Solo depende de nosotros el permitir que eso suceda.
Ana Laura
Rosas Bucio
Directora
General de CECAPIP
06 DE
ABRIL 2015.
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